Síntesis de los resultados
Este carabao —así como el esqueleto de otro carabao que también custodia el mismo museo— está en el Museo Darder de Banyoles desde 1916, año de su fundación. El animal proviene de la colección personal que el naturalista Francesc Darder comenzó hacia 1870 en Barcelona, a partir de compras y donaciones de varios orígenes en diferentes lugares de Europa, y que, en 1915, poco después de retirarse, donó al Museo Darder de Banyoles.
A pesar de que no se ha podido establecer con claridad cómo llegó el carabao a la colección Darder, parece muy plausible que su origen sea el archipiélago de Filipinas. Se han consultado varias fuentes con relación a los animales que fueron adquiridos, ofrecidos o vendidos por la Casa Darder, el Museo de Historia Natural y el Zoológico de Barcelona —instituciones todas ellas vinculadas a Francesc Darder— y no se ha encontrado ningún dato definitivo sobre la pieza objeto de estudio.
Aun así, diferentes elementos nos llevan a sugerir una reconstrucción cronológica de la procedencia (véase el siguiente apartado) que vincula al carabao con la Exposición General de las Islas Filipinas de Madrid de 1887 y la Exposición Universal de Barcelona de 1888.
Reconstrucción cronológica de la procedencia
La principal hipótesis con la que hemos trabajado es que este carabao llegó a la colección Darder en 1888, proveniente de la Exposición General de las Islas Filipinas de Madrid de 1887. Existe una fotografía, hecha en Madrid por J. Laurent y Cía., donde aparecen dos carabaos en el parque del Retiro, junto con un grupo de personas originarias del archipiélago filipino. Al año siguiente, en 1888, una propaganda del mismo Darder menciona que durante la Exposición Universal de Barcelona serán expuestos diferentes animales vivos, entre los cuales dos carabaos procedentes de Filipinas que se han recibido vivos y de los cuales se están preparando la piel y el esqueleto.
Siguiendo este hilo, podríamos establecer la hipótesis —pendiente de confirmar con nuevas fuentes— de que los dos carabaos, junto con un conjunto de objetos etnográficos, fueron adquiridos en Filipinas (en 1886 o 1887) y trasladados a Madrid para la exposición de 1887. Es plausible que, dadas las relaciones existentes entre Darder y Víctor Balaguer, el primero consiguiera la cesión o donación de los animales para la exposición de Barcelona de 1888. Acabada la Exposición Universal, los dos carabaos habrían pasado a la colección privada de Darder (1888-1889) y, finalmente, al Museo Darder de Banyoles en 1915 (que fue inaugurado el 1916), donde se conservan en la actualidad.
Estimación de la procedencia
El origen del carabao es el archipiélago de Filipinas y es muy posible que este llegase a España hacia finales del siglo XIX (podemos suponer que hacia 1886 o 1887), a pesar de que no sabemos exactamente de qué localidad o isla concreta procede. Podemos deducir que fue adquirido y transportado gracias a las instituciones y redes comerciales coloniales que los españoles tenían en el archipiélago.
Posibles clasificaciones alternativas
La palabra «carabao» es de origen tagalog, significa «búfalo» y se transcribe «kalabaw». En Filipinas, diferentes comunidades consideran a este animal como un símbolo de trabajo duro, lucha y paciencia. Es también un símbolo nacional muy extendido en el archipiélago, a pesar de que no está reconocido oficialmente. Podría añadirse su nombre en otras lenguas habladas en el archipiélago de Filipinas —hay alrededor de ciento cincuenta—, como por ejemplo en cebuà/bisaya/sugbuhanon (bupalo) o en subanen (kelabaw), una de las lenguas de Mindanao.
Fuentes complementarias
Archivos:
Índices de correspondencia oficial de Filipinas. 1886-1887. Archivo Histórico Nacional. ES.28079.AHN/16//ULTRAMAR,5294, exp.1.
Consejo de Filipinas y de las Posesiones del Golfo de Guinea. Archivo Histórico Nacional.
Inventari del Museu Darder. Espai d’Interpretació de l’Estany.
Bibliografía:
Balaguer, Víctor (1895). Filipinas. Madrid: R. Anglés, Imprenta y Cromotipia.
El naturalista (1889). Any III, 1, 6.
—(1889). Any III, 2, 14.
—(1891). Any V, 5, 3.
Flores Hernández et al. (1887). Crónica de la Exposición de Filipinas. Madrid: M. G. Hernández.
Sánchez Gómez, L. Á. (2003). Un imperio en la vitrina: El colonialismo español en el Pacífico y la Exposición de Filipinas de 1887. Madrid: CSIC Press.
Taviel de Andrade, E. (1887). Historia de la Exposición de las Islas Filipinas en Madrid en 1887 (2 vol.). Madrid: Imprenta de Uliano Gómez y Pérez.
